26 de febrero de 2017

Resurrection Hospital

No hay rumbo, no hay señales, sólo arritmias que perecen en los ecos del silencio... Palpitar del tiempo que atrapan las paredes marchitas bajo mantos húmedos y gélidos. Son las sombras, trampas del averno, que conducen a un viaje sin retorno hacia el infame Resurrection Hospital.